A una semana de la sanción de la ley de Banco de Vinos impulsado por el Gobierno provincial para intentar regular los desequilibrios de precios, se viene el armado del Consejo que lo administrará con participación del Ejecutivo y también de distintas cámaras del sector vitivinícola. 

“Es una herramienta, que no tiene muchos antecedentes en el mundo, para afrontar la difícil situación que sigue atravesando el sector primario. Para los que vendieron la uva, en un mercado que sigue achicándose, y tratan de terminar de cobrarla. Y para quienes elaboraron, porque tampoco repunta el precio del vino”, señaló Carlos Dávila, representante designado por la Cámara de Agricultura, Industria y Comercio de Tunuyán, en diálogo con el programa Nada Simple de Radio Andina 90.1.

¿Cómo funcionará? Según las condiciones comerciales del año, el productor-elaborador, de manera voluntaria, podrá optar por vender su vino o retenerlo. A cambio de ese “depósito”, cobrará una tasa por parte de la Provincia, que le asegure rentabilidad. 

Según Dávila “viene a tratar de regular la oferta en tiempos de desequilibrios y bajos precios, con el pago en efectivo de una tasa por un determinado plazo y calidad homogénea apuntando a ayudar sobre todo a los pequeños productores del mercado elaborador, que en el caso de las uvas de calidad de Valle de Uco se ha ido achicando. De nada sirve que favorezca a los grandes: acá la baja rentabilidad obligó a muchos productores a mutar a otras actividades”.

Lo que viene es definir la “letra chica” de la reglamentación para tener claro si habrá o no exigencias respecto a la procedencia del vino, para priorizar al elaborado en Mendoza. Es que ya es habitual en el circuito elaborador la compra tanto de materia prima como de caldos de distintas zonas de San Juan. 

Aunque se lo ha comparado con la instrumentación de un plazo fijo, el directivo tunuyanino aclaró diferencias sustanciales. “En vez de depositar dinero, se guarda vino. El Banco fija la tasa y forma de pago en una suerte de subsidio; no se busca rentabilidad financiera sino compensar en épocas de turbulencia, porque siempre la naturaleza u algún factor termina regulando el mercado y el productor resulta variable de ajuste”.

El INV (Instituto Nacional de Vitivinicultura) será el ente de contralor, a partir de un parámetro de calidad mínima que fije el Banco de Vinos. Ahora, desde el sector vitivinícola hay expectativa acerca de su rápida implementación, sobre todo ante el notable crecimiento de los despachos de vino (casi 7% hasta julio) lo que marca claramente cuánto creció el consumo durante la cuarententa y, con el, también los precios al público

FUENTE :https://www.sitioandino.com.ar/n/332821-banco-de-vinos-sancionada-la-ley-se-arma-el-comite-publico-privado-que-lo-administrara/